Director del proyecto: Enrique Martínez Goikoetxea
Lista de obra Folleto Nota de prensa Texto de Juan Francisco Rueda (catálogo) Textos en sala Dossier (Biblioteca)
Luis Gordillo XXL/XXI muestra en las salas de Artium la copiosa fecundidad creativa del autor sevillano. La exposición, cuya selección de obra y articulación ha sido planteada por el propio artista, se inició un año y medio antes de la fecha de inauguración, durante una visita al estudio del artista. En ese lugar se conformó la estructura básica del proyecto, cuya pretensión podría resumirse en la idea de trasladar la imagen caleidoscópica de su taller al espacio de exposición, es decir, en presentar el trabajo del Gordillo menos mediatizado o influenciado por otros intereses que no sean los propios de la experiencia estética, de su realidad creativa actual. En líneas generales, la selección de obra se ha realizado entre aquellas piezas de su última producción, incidiendo en grandes formatos y aquellas series en las que se encuentra investigando actualmente, dos tipologías de obra con una fuerte presencia en su proceso de trabajo.
La imagen del estudio del artista configura en sí una fiel aproximación a lo que en su obra investiga y desde ella se genera, un enorme collage de imágenes en evolución, cargadas de dinamismo y energía, a la espera de encontrar un equilibrio activo estable. Obras en proceso, imágenes fraccionadas, fotografías, reproducciones y pinturas configuran el macrocosmos en el que conviven archivos de documentos, cuadernos y pequeños objetos que se ordenan meticulosamente en submundos, seleccionados a partir de todo tipo de asociaciones e ideas. Este espacio, inundado por una enorme cantidad de luz natural, actúa como el crisol donde se funden el eléctrico y particular mundo del inconsciente del artista con una profunda onsciencia del mundo compartido.
El título de la exposición, XXL/XXI, podríamos leerlo en una traducción del código empleado en las tallas para la ropa como extra-grande/siglo 21. Desde él se incide en el tamaño, obras que llegan a alcanzar los 5 metros de longitud y un elevado número de elementos; al tiempo que sitúa cronológicamente estos trabajos en estos últimos 10 años. Son un total de 26 títulos, entre ellos varias series, que una vez desplegados mostrarán más de 60 elementos. Todos ellos juntos destilan multitud de matices sobre los principales intereses temáticos y el origen de la energía que propaga su trabajo. A través de estas obras se hace posible apreciar las diferentes maneras del artista de abordar su trabajo. En una de ellas, a la que Gordillo se refiere como vertical, el autor se enfrenta al lienzo en blanco, desde sus evocaciones interiores y su paleta. Un proceso que implica un enfrentamiento exigente del artista con su obra y con su propio interior. Desde el proceso horizontal, sin embargo, unas obras derivan de las anteriores, en un contínuo que podría llegar a ser eterno. Así se genera un doble acercamiento a la realidad del autor, uno incisivo, abismal, que nace desde la pulsión; el otro desde la gestión de ese impulso, a través de procesos que racionalizan, concretan, desarrollan una matriz desde la que investigar y experimentar planteamientos que renueven códigos, lenguajes, formas de hacer y de estar en el mundo. Conceptos como evolución, derivación o incluso desviación dan pie a la serie nuclear del proyecto. En él, varios de los títulos —los títulos, una herramienta que considera trascendental en la construcción de la imagen— nos remiten a Darwin, a un desarrollo evolutivo del trabajo, donde una obra incluye el germen de la siguiente, por medio de procesos como el desdoblamiento, el corte, el pliegue y la repetición, traspasados en una gran medida por el azar. Unos trabajos que incluyen medios fotomecánicos y digitales, cualquier tipo de herramienta que multiplique las posibilidades de análisis de la imagen y que faciliten la unión, en un mismo cuerpo de obra, de lo visceral y la norma.
Luis Gordillo nace en Sevilla en 1934. Comienza a pintar tarde, tras licenciarse en Derecho, y es a partir de su encuentro con la pintura informalista, tanto francesa como española, a finales de los 50, cuando da inicio a un trabajo marcadamente personal. Posteriormente conoce el pop y a partir de 1963 comienza a psicoanalizarse, una experiencia que afectará profundamente a su trabajo. En 1967 forma parte del grupo Nueva Generación, promovido por el pintor y crítico Juan Antonio Aguirre, para convertirse, poco después, en la principal influencia para una generación de jóvenes pintores como Carlos Alcolea, Guillermo Pérez-Villalta, Carlos Franco o Rafael Pérez-Mínguez, entre otros. En 1974 el centro M-11 de Sevilla organiza la primera muestra antológica de su obra, a la que le seguirán una innumerable sucesión de exposiciones, nacionales e internacionales, que llega hasta hoy. En 1981 recibe el Premio Nacional de Artes Plásticas y en 1996 la Medalla de oro al mérito en las Bellas Artes. En el 2007, año de su gran exposición antológica en el MNCARS, se le concede el Premio Velázquez de las Artes Plásticas.
Con motivo de esta exposición se editara un catálogo diseñado por Carlos Serrano y con textos de Juan Francisco Rueda y Daniel Castillejo.
Paraleloan / En paralelo, es el nombre del proyecto que enmarca dos nuevas exposiciones producidas por Artium: Juan Mieg. Xuxurlaka y Luis Gordillo XXL/XXI y que estarán abiertas al público desde el próximo 9 de abril hasta el 24 de agosto de 2014.
El origen de este programa y de las propuestas que aquí se presentan se encuentra en la intención de hacer coincidir en un mismo espacio/tiempo a autores que desarrollan su trabajo en el paraíso perdido de la pintura, trabajos que han llenado de argumentos y discusión la crítica artística, participando decididamente de la renovación de los lenguajes artísticos y que hoy, en la actualidad, mantienen su labor investidos de una misma energía creativa. El proyecto señala entre sus objetivos recontextualizar, poner en valor en el contexto de la creación contemporánea, una técnica que parece haber perdido el estatus estético que ha tenido a lo largo de la historia. Una técnica, la pintura, que siendo tradicional no tiene nada que ver con lo académico y que mantiene intacta su capacidad de evocar una relación natural, íntima (¿erótica?), del artista con el acto creativo y de la obra con su público. Por otro lado, se pretende provocar una reflexión sobre el propio contexto artístico, en el que el discurso suplanta tantas veces al objeto, para enfatizar la experiencia sensorial de la realidad física de la pintura.
Nacidos en la década de los 30, ambos artistas pertenecen a una generación que participó de las mismas necesidades por superar los lenguajes académicos del momento. Dos proyectos vitales paralelos, con dos opciones estéticas diferentes, pero que mantienen en la actualidad la pulsión de la creación en un diálogo, cara a cara, con la contemporaneidad.

